Cajón de Sastre por Luis Parreño (II)

BAILANDO
 
Dos corazones están bailando
pegados el uno al otro, lento,
sin ruido, sin alboroto,
el uno del otro dentro.

No hay música ni canciones,
para ellos el concierto
lo están dando sus latidos
entre pausados e inquietos.

Dos corazones están bailando
ese baile armonioso, discreto,
que bailan las parejas en la noche
alumbradas por estrellas en el cielo.

Cualquiera que los vea pensará
en jóvenes enamorados, nuevos,
y con una sonrisa invocará recuerdos
intentando comprender sus sentimientos.

Y sin embargo, nada más lejos,
ya no son jóvenes, nuevos,
pero siguen bailando su ritmo
acompasado como la música, lento.

Porque son tu corazón y el mío
sorprendidos en cualquier momento,
desde el principio hasta el fin
bailando un lento de amor eterno.